Mi amigo y «vecino» Pedro siempre nos dice que una de las cosas importantes que todo inmigrante debe cambiar en su forma de pensar es el: «Yo era fulano de tal«, ya que al final lo importante aquí en Canadá es quién eres y en especial quién quieres llegar a ser.
Este punto puede llegar a ser de discusión muy compleja, así que la idea central a la que quiero referirme es al hecho de que un 99 % de los inmigrantes somos unos completos desconocidos para este mercado laboral, ya sea como profesionales o cuando se habla de las empresas para las que trabajamos en nuestros países de origen. Salvo que sean empresas transnacionales como Coca Cola, Pepsi o Toyota, por ejemplo, muy pocos aquí sabrán que Polar es una de las empresas más importantes de alimentos de Venezuela y quizás de América Latina, o que Éxito es una gran cadena de supermercados colombiana, o que la brasileña Embraer es una de las más importantes en materia de aviones a nivel mundial, o que Codelco es una gran empresa chilena del cobre, etc.
Todo aquel que ocupó un puesto importante en el pasado en alguna empresa «importante» de su país no necesariamente tiene que llegar aquí a comenzar de cero, pero es muy seguro que pocos empleadores consideren relevante que fui gerente de X departamento de esa «importante» empresa de «mí país», puesto al que no «cualquiera» llega sin la formación y la experiencia requerida. Insisto, más que intentar ganar un puesto de trabajo diciendo «yo era….», aquí hay que ganárselo demostrando lo que se sabe y de lo que se es capaz de hacer, y muy importante el saber diferenciarse de los demás, porque no serán pocos los que hablen dos tres y hasta cuatro idiomas y tengan postgrados igual que nosotros.
Aquí, en la mayoría de los casos, hay que comenzar en cargos un poco más «junior» al que se tenía antes de venir, mas es posible que una empresa reconozca nuestra experiencia y lo que podemos aportarles, por ende, nos den la oportunidad desde el principio de ocupar un puesto similar al que teníamos. Aquellos con áreas profesionales muy específicas y demandadas por el mercado laboral, puede que tengan ya un gran paso ganado en comparación a otros inmigrantes e incluso ante los locales, pero igualmente deben demostrar dominio como mínimo, de uno de los idiomas oficiales.
En el caso de los profesionales «de renombre» puede que pase lo mismo, ya que aquel asesor financiero que en Venezuela es ampliamente reconocido y respetado a nivel nacional y siempre aparece en los medios como un gran especialista, aquí es un completo desconocido; o el caso de periodistas, abogados, jueces, médicos, y pare de contar.
Todo depende de cada quien y de cómo cada persona «sepa venderse» ante los empleadores canadienses, pero sobre todo de lo que cada quien quiera y le haga feliz. Digo esto último, porque aquí, el que fue gerente en su país pero de casualidad tenía tiempo para ver a su familia, puede que decida optar por un puesto de trabajo de menor «rango» aunque siempre con un salario que le permite vivir tranquilo, y su horario y responsabilidades le dejen aprovechar esos minutos valiosos con sus seres queridos…. Total ¡La vida es una sola y hay que disfrutarla!
Por: SCA
Fuente: http://asiveoyvivocanada.blogspot.com/
Imagen: web