Luis María Frómeta, mejor conocido como «Billo», creador de la orquesta Billo’s Caracas Boys, nace el 15 de noviembre de 1915 en la ciudad de Santo Domingo, capital de la República Dominicana. Años después se traslada, junto a su padres y hermanos, a residenciarse en San Francisco de Macorís, ciudad del interior de la república. En la escuela primaria era materia obligada la música, asistiendo diariamente a la academia antes de entrar a clases.
A los 15 años fue fundador y primer director, con el grado de capitán, de la Banda del Cuerpo de Bomberos de Ciudad Trujillo, compuesta por 48 profesores. Lo que fue una buena oportunidad para practicar y ampliar sus conocimientos de armonía y composición, así como sus pasos en el campo de la instrumentación. También fue fundador de la Orquesta Sinfónica de Santo Domingo.
En el año 1933, Billo se traslada de nuevo a la capital y comienza a dar clases de guitarra a domicilio, hace arreglos pequeños para conjuntos musicales y es cuando conoce a Freddy Coronado, quien lo anima a formar un grupo que se llamó Conjunto Tropical y que trabajaba en la emisora de radio HIN.
Billo y sus compañeros de orquesta llegan a Venezuela el 31 de diciembre de 1937, para tocar en el Roof Garden, primer local danzante de prestigio en la Caracas de entonces, ubicado en pleno centro de la ciudad, en la esquina de La Torre, frente a la Plaza Bolívar. Los hermanos Sabal, dueños del Roof Garden, decidieron cambiarle el nombre de la orquesta por el de Billo’s Happy Boys. Esta modificación generó protestas en la República Dominicana porque se evitaba la mención de la capital de aquel país. Este inconveniente y la prórroga consecutiva del contrato fueron obligando a los músicos y cantantes a permanecer en la ciudad de Caracas.
En 1939 Billo se vio afectado por el tifus, los médicos dijeron que era imposible salvarlo. La orquesta se disolvió. Pero hizo quedar mal a los médicos y meses después, tras haber perdido el cabello, volvió a tomar la batuta y el saxofón. En 1958, a la caída del Gobierno del general Pérez Jiménez, Billo sufrió una serie de ataques, quizá desatados por la envidia ante los éxitos que cosechaba, teniendo que enfrentar demandas y hasta un veto por parte de la Asociación Musical de D.F. y estado Miranda, prohibiéndole actuar de por vida en Venezuela.
En mayo de 1960 regresa a Caracas y le es levantado el veto en una asamblea de la Asociación Musical convocada para tal fin, que en su mayoría vio como injusta y personal la medida en contra del Maestro.
Su gran ilusión se iba a cumplir el día 28 de abril de 1988, dirigiría la Orquesta Sinfónica de Venezuela en el majestuoso Teatro Teresa Carreño, en el marco del homenaje por sus 50 años de vida artística en Venezuela, pero un día antes, cuando termina el ensayo de la canción Un cubano en Caracas, sufre un derrame cerebral. Billo fallece una semana después, el 5 de mayo.
Esta fue la vida de un hombre que se convirtió en el gran personaje de la música bailable de Venezuela, que compartió gratos momentos con su música y ha sido el más aplaudido director de orquesta en el país con su orquesta Billo’s Caracas Boys, la más popular de Venezuela.
Fuente: http://www.orquestabillos.com/
Imagen: Web.