En 2011, un grupo de amantes del béisbol mundial, venezolano y zuliano, liderados por el profesor universitario y cronista de la pelota, José Joaquín Villasmil, presentaron al gobernador de ese momento la propuesta para la creación de un acto especial para resaltar al destacado exjugador de grandes ligas, Luis Aparicio. Se aprobó de inmediato y ahora, cada año, todos los 11 de noviembre se celebra el Día de Luis Aparicio, único venezolano en el Salón de la Fama del Béisbol de Grandes Ligas. Además, el short stop zuliano siempre jugó con el número 11 en su uniforme.
Aparicio debutó en grandes ligas el 17 de abril de 1956, con los Medias Blancas de Chicago, temporada en la cual recibió el premio Novato del Año de la Liga Americana. Jugó con Chicago hasta 1963, y fue cambiado al equipo Orioles de Baltimore, donde jugó hasta 1967; al finalizar dicha temporada, regresa a los White Sox y se mantuvo desde 1968 a 1970, pero fue cambiado entonces a los Boston Red Sox, donde jugó desde 1971 hasta su retiro en 1973.
Durante nueve años seguidos, Aparicio fue el líder de bases robadas de la Liga Americana, con un total de 506 en su carrera. Pero su mayor logro fue convertirse en el primer venezolano en las mayores en ganar una Serie Mundial y lo hizo con los Orioles en 1966.
En 1984, en su sexto año de candidatura al Salón de la Fama del Béisbol, Luis Aparicio logró el primer lugar en las votaciones con 341 votos, el 84,62 % del total, y fue así como se convirtió en el primer y único venezolano hasta ahora en formar parte de este selecto club de Cooperstown.
De por vida en las mayores, jugó dos mil 601 veces, con 10 mil 230 turnos al bate en los que hizo mil 335 carreras, dos mil 677 hits, la desapareció 83 veces y empujó 791 carreras para así lograr un promedio de bateo de .262.
Fuente e imagen: Globovisión