Las torres del Centro Simón Bolívar, también conocidas como las torres de El Silencio, fueron inauguradas el 6 de diciembre de 1954.
En realidad, el conjunto residencial de El Silencio (1942-1945) tiene su arranque en el proyecto urbanístico de Carlos Raúl Villanueva, considerado el primer gran arquitecto de la Venezuela moderna, en el marco de un país pujante, que recibía emigrantes europeos a raudales y en el que su poderoso gobernante convertido en dictador aplicó mano dura y antepuso la eficacia en la construcción de grandes obras públicas.
Las torres fueron construidas a partir de un proyecto del arquitecto Cipriano Domínguez en colaboración con Tony Manrique de Lara y José Joaquín Álvarez, y sus primeras trazas datan de 1948. Esta obra constituye un ejemplo único de arquitectura urbana, funcionalista y monumental.
La edificación consistió en la construcción de dos torres gemelas. Sus dimensiones alcanzan 103 metros de altura, con 26 pisos. En su base se entrelazan una red de calles, que comunican los sectores adyacentes.
Durante muchos años las torres de El Silencio fueron el icono más representativo de la modernidad en la que vivía Venezuela desde mediados de la década de los cincuenta, en pleno auge de la dictadura de Marcos Pérez Jiménez. Y lo fueron bastante tiempo, en el que ostentaron el honroso título de los edificios más altos de Venezuela, hasta la construcción de las torres del Parque Central.
En el año 2005, el Concejo Municipal capitalino declaró el Centro Simón Bolívar, Patrimonio Municipal de Caracas.
Para la construcción de este complejo tuvieron que abrir un inmenso hueco que arrasó con la parte sur del cuadrilátero histórico de 25 manzanas y, junto con la avenida Bolívar, dividió el centro en dos mitades.
Según investigaciones arqueológicas realizadas en un patio del Palacio de las Academias, en los años 90, donde construyeron las Torres de El Silencio existió una ranchería indígena en el siglo XVII, una invaluable referencia histórica del pasado indígena del valle de Caracas y de la formación de cinturones de miseria en la entonces periferia de la joven ciudad.
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