Por: Mirsay Shimkevich
Hace poco, mi esposo y yo, tuvimos un pequeño contratiempo en el carro. La aguja del tablero indicaba que el carro estaba recalentado. Por ese motivo, tuvimos que orillarnos en la acera y avisar a los familiares. En Venezuela, bajo estas circunstancias, el carro hubiese estado “accidentado”. Es muy común escuchar a familiares y amigos decir: “Estoy accidentado”, “me quedé accidentado”.
Al parecer esta frase tiene otro significado aquí en México. Me dispuse a llamar a mi suegra para avisarle que nos habíamos quedado “accidentados” y muy angustiada empezó a preguntarme: ¿Ustedes están bien?, ¿No les pasó nada?
Al levantar la mirada, pude observar que mi esposo arrugaba la cara y negando con la cabeza decía: “No le digas esoooooooo”
Obviamente me preguntaba: ¿Y ahora que dije?
Para los mexicanos la palabra “accidentado” es tener un accidente grave, o un choque. Es literalmente, tener un accidente.
A veces no sé si mi familia mexicana podrá sobrevivir a mí y mis expresiones.
https://experienciasmirsanas.wordpress.com/2015/11/06/360/