Día D! Parte 2 (Japón)

Bueno, continuamos con la parte dos del viaje a Japón. Por supuesto, dada la condición de mi teléfono, la batería se me acabó y no hay mucho respaldo fotográfico, pero bueno, al final viene algo cool (quizás).

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Luego de que me acuchillaran la caja de chocolates, abordamos el avión Juan y yo, aún sin saber de Gustavo, y ambos sin teléfono con qué comunicarnos. Por supuesto, como cada quien hizo Check-in por su lado, nos tocaron puestos muy distintos en el avión. A mi me tocó al lado de una tía muy maja, apodada Lala, proveniente de la madre patria España, y dada la duración del vuelo, tuvimos oportunidad de hablar de muchos temas, Venezuela, la crisis en España, qué carrizo iba a hacer yo tan lejos, etc.

Al parecer, estábamos viajando con viento en cola, o eso fue lo que entendí, por lo que el viaje se acortó un poco. Llegamos a Frankfurt, y saliendo del avión nos encontramos a Gustavo, que tenía una cara de preocupación enorme. Nos saludamos, y comienza a echar el cuento:

Gustavo > Mar*co, no saben lo que me pasó.

Juan y yo > ?

Gustavo > Me vine sin los dólares que había ahorrado para venirme a Japón, creo que me los robaron…

Todos > FFFFFFFUFUUUUUUUUUUUUUCCCKKKKKKKKKKK

Yo creo que hasta aquí ha quedado bien claro que a pesar de que uno va a recibir una beca, uno tiene que ahorrarse por lo menos 1500 o 2000 dólares, porque cuando llegues, evidentemente vas a tener gastos. De hecho, la embajada dice explícitamente en los papeles que deberíamos traer por lo menos 2000 dólares, pero dependiendo del caso, no es siempre necesario. El hecho de que a Gustavo se le hubiesen perdido representaba un golpe fuerte para él, desde todo punto de vista. Incluso comentó que estuvo hasta última hora buscándolos como loco, y que pensó en no venir, pero al final decidió venir y ver cómo resolvía en el camino, la más sabia decisión que pudo tomar.

Salimos del avión y el aeropuerto estaba vacío, a mi parecer. No se si es que el aeropuerto de Frankfurt es tan grande que en nuestra área había poca gente, o si era el hecho de que era martes. Lo cierto es que comenzamos a seguir la señalización para ir a la siguiente puerta, ya que como ambos vuelos eran de Lufthansa, no teníamos que pasar por inmigración. Aún teníamos tres horas. Llegamos a un punto de control y Juan pasó de primero. Le hicieron quitar todo lo que cargaba encima, hasta los zapatos, y lo metieron en un Scanner que parecía una máquina para hacer tomografías. Gracias a Dios, a Gustavo y a mi nos dejaron pasar sin rollo. Ya luego de eso nos volvieron a escanear todas las maletas, y llegamos a la puerta. El aeropuerto bello, gigantesco, con muchas tiendas de Duty Free en donde quería comprar TODO pero como buen pelabola no compre ni un chocolate.

Esperando! :)

Yo pensé que en todos los aeropuertos habría Wi-Fi gratis, pero no es así. En Frankfurt, todo el Internet que hay es pago. Gustavo, pendiente de su rollo, sacó un sencillo (o monedas, para el que no entienda) en euros que tenía, y los metió en una PC que aún usaba XP creo. Con lo que le metió, le daba para dos minutos y algo, y le pusieron un temporizador al lado. La situación parecía de película, una carrera contra reloj, pero en vez de estar hackeando la página del Pentágono, estaba abriendo su correo. No se imaginan el alivio que sentí cuando Gustavo nos dice “aparecieron los dólares”… WOW, a Gustavo le volvió el color a la cara, y bueno, estaba muchísimo más tranquilo. Al parecer los escondió tan bien que ya no se acordaba de dónde. Luego averiguó su número de tarjeta y logró comprar acceso a Wi-Fi por un día en su tableta, y muy amablemente nos la prestó para avisar a casa que llegamos. En Frankfurt, por cada cuatro sillas hay un HUB con dos conectores USB, lo que me pareció muy útil, y que utilicé para cargar el teléfono un poco. Ahora que lo usaría en modo avión, tendría un mejor rendimiento de pila seguramente.

Luego de eso, el tiempo se me pasó brutalmente rápido. Caminé por algunas tiendas, y ya, a abordar. Este vuelo estaba lleno de japoneses, y me daba terror, porque yo tenía 10 años sin hablar japonés, y mi principal miedo era no acordarme de nada y no entender ni pepa.

Cabe destacar que en la puerta, desde que llegamos, nos esperaba el avión que nos llevaría a nuestro último destino, Narita. La máquina, nada más y nada menos, era un Airbus A-380-800 por fin! jajaja tanto tiempo anhelando conocer el avión con más alta capacidad de pasajeros en el mundo! De más está decir que es una belleza, acá les dejo una foto.

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En este vuelo iba en uno de los puestos del medio, por lo que fue medio incómodo, pero al final dormí y vi películas, así que estuvo bien. El vuelo fue largo, y Narita nos recibió con lluvia, pero como era de esperarse, todo salió bien. Los tres empezamos a caminar hacia inmigración, felices porque por fin habíamos llegado. Sin embargo, no sé por que razón (creo que fuimos al baño o algo así) llegamos prácticamente de últimos a inmigración, y había una cola ASQUEROSA como de 32480930498 personas. Lo peor es que yo creo que la mayoría era gente de nuestro vuelo, y ahí fue que me di cuenta de lo grande que es el A-380. Sin embargo, la cola se movió bastante rápido, y pasamos por inmigración donde inmediatamente nos emitieron nuestra tarjeta de residencia en Japón.

Y ya, finalmente estábamos en Japón, la tarea había sido conseguida. Luego de casi tres días, estábamos en Narita.

Los muchachos tenían que llegar solos a sus universidades, pero como les comenté, la Universidad de Tohoku arregló con una agencia de viajes llamada Top Tour, que nos fuesen a buscar y nos diesen los pasajes del Shinkansen. Al salir, nos estaban esperando a mi, un muchacho de Eritrea llamado Tareg, y un muchacho de Manaus, Brasil, llamado Rodrigo.

Juntos nos fuimos con nuestras maletas al Narita Express, y nos montamos. Llegamos a Tokyo Station, y ahí nos bajamos y a correr para buscar nuestro Shinkansen que iba a Sendai. Lo difícil fue correr con las maletas, pero aún así llegamos a tiempo, y nos montamos… todo lo que quedaba era esperar.

 

Fuente: https://toyoenjapon.wordpress.com/

Imagen: http://www.kkday.com

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