¿Sabes qué es exactamente la cábala?

La palabra «cábala» es de origen hebreo y literalmente significa “recibir”, lo que sus seguidores interpretan en el sentido del placer de conocer y el grado máximo de deleite que supone saber por saber.

Se trata de un sistema cerrado que pretende entender lo absoluto a partir de la Torá, libro judío de enseñanzas y de la ley que corresponde a los cinco primeros libros de la Biblia cristiana. Tiene una parte de carácter esotérico y misterioso porque, para desentrañar sus enseñanzas reales (y no solo aparentes), en esta disciplina juega un papel primordial el sentido oculto asociado a ciertos términos, así como el de las letras que los componen, tomadas como símbolos o como números.

La cábala nació entre los judíos catalanes del siglo XII, y uno de sus primeros sabios fue el judío aragonés Abraham Abulafia, que viajó a Roma con el propósito de convertir al judaísmo al mismísimo papa Nicolás III, misión que, como era de esperar, no logró cumplir.

Para los judíos, la cábala no es misticismo, es una ciencia.  Es una manera de conectarse directamente con eventos que parecen mágicos e insondables debido a que no se entiende cómo funcionan. «Sería lo mismo que alguien llevara un encendedor a una tribu viviendo en un lugar apartado en donde nunca hubieran visto un artefacto de este tipo. Esta persona sería considerada como el dios del fuego, o alguna mística criatura que puede aparecer llamas en sus manos. Esto significa que se trata simplemente de lo que está oculto y lo que está revelado», explica la Academia Internacional de la Cábala.

Además agrega, «la cábala no es magia. La magia implica el uso de fuerzas superiores ocultas para manipular a la gente, conseguir lo que se desea y obtener determinados resultados para beneficio personal en detrimento de otra persona.  El alcance dentro de la Cabalá es una cuestión de transformación interior y no existe la posibilidad de acercarse a esta fuerza sin ese requisito. Por lo tanto, no hay relación alguna, como no sea en la  imaginación».

Fuente: Muy Historia

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